lunes, 27 de abril de 2015

Ré-volver.

Hace demasiados corazones rotos
que los besos son sólo bocas,
                                   tantos,
que me han bailado las dudas
con lo incierto de nosotros.

                             Tanto,
que he repetido 'volver'
cuando de sobra sé
que no me quedan últimas palabras.

Y me las muerdo en la boca
-aunque a veces a otro-
como para que no te des cuenta
pero te quede claro que tú
eres mi única verdad universal.

Qué cosa la ausencia,
qué cosas las calles.

Me ha parecido olerte
y ni siquiera llevaban tu perfume.

Me ha parecido escuchar tu voz
en un ruido del pasillo y
                    durante un momento
he tenido ganas de echarte de menos.

Se ha colado por la ventana una canción
y
      aquí estoy, escribiéndote.

He recordado por suerte
          -o por desgracia-
lo bonito de tu boca sonriéndome de cerca
y el miedo a que fuera la última vez
           en todos y cada uno de los besos.

Aún ahora,
no acabo de creerme que hayamos sido
          -tanto, tantos, tantas veces-
pero mucho
                             mucho menos
que hayamos dejado de ser.